Jaén
Con la invasión de las tropas musulmanas en nuestra península, Jayyān, (Jaén en árabe), fue capital del Alto Guadalquivir al ser trasladada desde la antigua Mentesa (La Guardia), por Abd - al – Rahaman II. Más tarde, en el siglo X, sería conquistada por Abdelazib siendo la capital del reino de Dijaryan. En 1901 fue incorporada al imperio almorávide, para ser ganada posteriormente por los almohades en 1148. En la Batalla de las Navas de Tolosa en el año 1212, los cristianos conquistan los territorios ocupados, lo que provoca la apertura del valle del Guadalquivir. En 1246 la ciudad es cedida al Reino de Castilla a consecuencia de un pacto de vasallaje con el rey nazarí de Arjona Muhammad I “al – Alhamar”. De esta forma Jayyan pasa a llamarse Iahen pasando también a ser un lugar estratégico que sirvió de base para numerosas incursiones. En el año 1300 fue atacada por los nazaríes sin conseguir la ocupación de la ciudad. Jaén se fortifica y en el siglo XV sirve de plaza fuerte al condestable Lucas de Iranzo. Jaén conoce la paz y en el siglo XVI entra en una etapa de reconocimientos y privilegios reales, al igual que conoce su máximo esplendor.
Vista general de la ciudad de Jaén.
En la Calle Maestra Martínez de Molina podemos encontrar el centro cultural y la oficina de información de la ciudad. Este último edificio es también punto de información de las Rutas del Al – Ándalus.
El Palacio de la Diputación Provincial es un edificio inspirado en los palacios del Renacimiento italiano.
Palacio Episcopal. Este edificio albergó hasta hace pocos años la residencia episcopal, sede central administrativa de la diócesis de Jaén.
La Iglesia de la Magdalena es la más antigua de la ciudad. Hunde sus raíces en una primitiva sinagoga, que según las fuentes, pudo ser fundada en el siglo VIII por Abderramán II. Frente a ella existe una fuente en la que dice la leyenda era la morada del Lagarto de Jaén.
Portada de la Iglesia de La magdalena.
De dicha mezquita se conserva la especial disposición del actual templo, con cuatro naves, así como los restos del shan o patio de abluciones, cuyos arcos y un aljibe central encontramos todavía en el patio de la actual iglesia de la Magdalena.Iglesia de San Juan con su famosa Torre del Consejo.
El Palacio de Villardompardo fue construido en el siglo XVI por el Virrey del Perú, D. Fernando de Torres y Portugal aprovechando los cimientos de un hamman medieval. Tiene influencias renacentistas albergando en su interior un bello patio de columnas. A finales del Siglo XV el Conde de Villardompardo D. Fernando de Torres, levantó su Palacio sobre los Baños, quedando parte de ellos ocultos entre los cimientos y sótanos, conservándose hasta la actualidad. El palacio hoy, también es sede del Museo de Artes y Costumbres Populares y del Museo Internacional de Arte Naïf Manuel Moral. El hamman medieval fueron también llamados “Baños de Alí”, siendo considerados los más importantes de la ciudad. Fueron declarados Monumento Nacional en 1917. Estaban repartidos en 4 estancias: el vestíbulo de mármol y arcos rojos y blancos, a continuación la sala fría y la sala templada y caliente. Cuentan con 450 metros de extensión, siendo el de mayor tamaño y los mejores conservados de Europa. En la actualidad pueden ser visitados. El monumento en su conjunto, fue declarado Monumento Histórico-Artístico en 1931.
Al fondo del patio, y tras un pórtico de cinco arcos, se accede a los Baños de Alí, los baños árabes más grandes de Europa.
Tras la conquista de la ciudad en 1246 por Fernando III, su uso continuó durante los primeros años de dominio cristiano. Será entre los siglos XIV y XV cuando desaparezca su función como baño al establecer los cristianos en sus salas unas tenerías. Muestra de ello son los restos que aún quedan en las Salas.
La Santa Iglesia Catedral de la Asunción de la Virgen de Jaén está edificada en el solar de una antigua mezquita. Fue construida en el siglo XVI en un exquisito estilo renacentista. Fue convertida en iglesia mayor, cuando Fernando III el Santo en el año 1249 reconquistó la ciudad. En el año 1550 el Cabildo encargó a Andrés de Vandelvira la construcción de la Catedral. Vandelvira tuvo que fijar su residencia en Jaén, donde trabajó en sus obras hasta que falleció en 1575. La continuación de la obra la llevó a cabo su discípulo Alonso Barba. Este templo es de planta rectangular, con dos edificaciones adosadas, el "Templo del Sagrario" en la fachada norte y la "Sacristía" en la sur. En su interior se custodia, entre otras obras de arte y objetos religiosos, la reliquia del Santo Rostro o «La Verónica», alojada en la capilla mayor, y que se expone ante el público todos los viernes.
Vista general de la Catedral de Jaén.
La fachada, realizada por Eufrasio López de Rojas entre 1667 y 1668, mide 32 metros de altura por 33 de anchura, sin incluir las torres. Tiene varios balcones desde los que se exponía el Santo Rostro para bendecir tierras y gentes. Este monumento sobresale especialmente por la puesta en escena de un gran muestrario iconográfico.El altar, es de mármol rojo formando un cuadrado de cinco metros de lado. Sobre éste, a unos 70 centímetros del borde, se levanta otra plancha de mármol de 25 centímetros de grueso, con remates de bronce. En su centro está el sagrario enmarcado con adornos y flores.
La Catedral alberga verdaderas obras de arte admiradas por fieles, no solo de Jaén, también de otros muchos lugares. La Virgen de la cabeza, patrona de Andújar.
Nuestro Padre Jesús, El Abuelo, son las imágenes más importantes y más veneradas de la provincia.
Declarado Monumento Histórico Artístico en el año 1931, el Castillo de santa Catalina está considerado como uno de los monumentos más destacados de Andalucía. Fue construido sobre una peña de 820 metros de altura en las estribaciones de la Sierra de Jabalcúz. Esta fortaleza es de origen árabe, siendo alcázar durante el reinado nazarí. El nombre del castillo es adquirido a raíz de la construcción de una capilla en honor a Santa Catalina de Alejadría, la cual se levanto entre los siglos XIII y XIV tras la conquista del castillo. En el siglo XV el Condestable Miguel Lucas de Iranzo realizó reformas uniendo el Alcázar Nuevo con el Alcázar de Abrehus, separados entonces por una explanada. Finalizó las obras con la construcción de la Torre del Homenaje.
Entrada a la Fortaleza.
Junto al Parador Nacional de Jaén se pueden apreciar estas increíbles imágenes del exterior del Castillo.La Cruz del Castillo está a la izquierda del castillo y es el punto más elevado de la ciudad. Se dice que esta cruz hace memoria a la que en aquel mismo lugar mandó colocar Fernando III el Santo tras arrebatar la fortaleza al rey Alhamar.
Para terminar nuestra visita a Jaén nos despedimos de la ciudad admirando el Monumento a las Batallas situado en pleno centro urbano. Es una robusta columna construida en 1910. Está coronada por la diosa Niké. Conmemora las Batallas de Las Navas de Tolosa (1212) y Bailén (1808).
Un buen lugar para comer es “El rincón de Cerezo”. Este restaurante ofrece comida casera y tradicional de Jaén. Podéis saborear buenos guisos y sentiros como si estuvierais en vuestra propia casa.
En el año 711 ya aparece como una de las ciudades ocupadas por los ejércitos del general bereber Ṭāriq ibn Ziyād al-Layti, convirtiéndose ésta en la capital de una de las coras de Al – Ándalus. En el emirato de Abderamán II la Cora fue trasladada a Yayyan (Jaén). Lo que motivo que la ciudad fuera llamada por su antiguo nombre, “Mantissa”. A partir de aquí, en el siglo VII, la ciudad se fortificó construyendo su inexpugnable castillo. En el año 1244 el rey castellano Fernando III el Santo conquista la ciudad, pasando dos años después a ser puesto avanzado en la frontera y cambia de nombre a La Guardia. Desde este periodo cambia varias veces de manos hasta la rendición de Granada.
En la misma plaza existe una réplica de la Fuente de Los Leones que se encuentra en los palacios nazaríes de la Alhambra en Granada.
Esta obra fue proyectada por Vandelvira, con la colaboración de Francisco del Castillo. Presenta en su interior un presbiterio con detalles iconográficos considerados una verdadera obra de arte.
Fuente de la Plaza de Isabel II de La Guardia de Jaén, obra de Francisco del Castillo "El Mozo" (1566).
Situada en la Plaza de Isabel II encontramos esta otra fuente. Es la reproducción que estaba en el claustro del convento. La pieza original se encuentra en el patio del palacio de la Diputación Provincial de Jaén
También se encuentra las ruinas de la iglesia de Santa María, la antigua y primitiva iglesia de la villa.
La historia de la época musulmana de Cambil, aparece citada por primera vez en el siglo XII, donde se describen dos aldeas que formaban el núcleo de población, “Qanbil” y “Alhabar” una separada de la otra por el río. Ambas estaban protegidas por un castillo en cada una, por lo que tuvieron gran importancia estratégica. En 1315 el infante D. Pedro, tío de Alfonso XI arrebata los castillos a los árabes, lo que propicia contantes luchas entre nazaríes y castellanos por el control de este punto fronterizo. En el año 1365 Cambil y Alhabar vuelven a ser conquistados por los musulmanes. Tras varios intentos de hacerse con los castillos, en 1485 el Rey Católico Don Fernando los conquista ,utilizando por vez primera el ataque masivo de la artillería. Al ser fulminados los castillos, los musulmanes se rindieron entregando lo que quedaba de las fortalezas. De esta forma el camino quedó libre hacia la conquista de Granada.
Vista general de Cambil.
Ayuntamiento de Cambil
Placeta popular muy cerca de la Plaza de la Constitución.
Iglesia Parroquial de la Encarnación, en la Plaza de la Constitución de Cambil. En ella se encuentra el popular Cristo del Mármol.El castillo de Alhabar se encuentra sobre una de las dos imponentes peñas del pueblo. Se trata de un murallón casi vertical separado por un tajo labrado por el río.
De camino hacia Huelma encontramos el Santuario de la Virgen de la Fuensanta. Lugar que elegimos para descansar.
“Walma”, que así se conocía a Huelma en época musulmana, aparecíiendo en las crónicas como asentamiento de miembros del clan de los Banu Yuzay. Entre la segunda mitad del siglo XIII y mediados del XV, Huelma fue plaza fronteriza y avanzadilla para el Reino Nazarí, pasando con frecuencia de manos nazaríes a castellanas en varias ocasiones. En 1435 Fernando Alvares de Toledo intenta hacerse con el castillo sin conseguirlo. Tuvo que pasar 3 años para que se rindiera a los ejércitos de Íñigo López de Mendoza, Señor de Hita y de Buitrago, Capitán Mayor de la frontera y primer Marqués de Santillana. Años más tarde en 1465 el Marqés de Santillana cedía sus privilegios sobre la ciudad a su yerno, Don Beltrán de la Cueva, y este, a su vez, a su padre, Don Diego. Tras la conquista de Granada por los Reyes Católicos, Huelma entró en una época de prosperidad gracias a la estabilidad política y la repoblación, lo que propició la consolidación de sus habitantes. En el año 1530 comenzaba la construcción del templo parroquial por los más ilustres artistas y arquitectos de la época. Se levantó así, uno de los templos más monumentales de la provincia de Jaén.
Ayuntamiento de Huelma.
La Iglesia de la Inmaculada Concepción es uno de los ejemplos más notables de la arquitectura del siglo XVI de toda la provincia, participando en la obra los más grandes artistas de la época: Siloé, Francisco del Castillo, Vandelvira y Francisco del Castillo el Joven etc...
Antigua fuente cerca de la Iglesia de la Inmaculada.
El Castillo de Huelma es llamado también “El Castillo de Alburquerque". Fue levantado en el montículo que domina el pueblo. Las fortificaciones fueron edificadas por los árabes en el siglo XIII mientras que la fortaleza es cristiana datada entre los siglos XV y XVI.
“Wad y hortus” Río de los huertos. Esta localidad toma su nombre por estar junto al cauce del río Guadahortuna, cobrando protagonismo en época musulmana al ser territorio fronterizo. Esto propició las incursiones de las tropas acuarteladas en Cazorla hostigando a sus habitantes. En el año 1486 los ejércitos de los Reyes Católicos comandados por don Fadrique de Toledo, conquistan estos territorios dejándolos despoblados. Esto hizo que, en el año 1503, la reina Isabel dispusiera su repoblación con vecinos cristianos para garantizar la seguridad de los caminos y el abastecimiento de pan a Granada. A partir de 1492, Guadahortuna pasa a formar parte de la ciudad de Granada llegando con esto una época de gran esplendor. Formó parte de las denominadas “Siete Villas” de Granada junto a Iznalloz, Colomera, Moclín, Montefrío, Illora y Montejicar. En el año 1557 compra su independencia mediante el pago a la Corona de casi dos millones y medio de maravedíes aportados por su población. Durante los siglos XVI, XVII y XVIII, Guadahortuna alcanza un gran desarrollo, gracias a la industria del vidrio.
Vista general de Guadahortuna.
Ayuntamiento de la localidad.
La ermita de Nuestra Señora de Loreto, dedicada a la patrona, está ubicada a la entrada del pueblo y es un lugar desde donde se puede admirar el horizonte de la Villa.
En el territorio de Píñar se han encontrado vestigios de asentamientos humanos datados en el Paleolítico Medio y el Neolítico. Muestra de esto, lo vemos en los yacimientos arqueológicos y cuevas encontradas. También aparecen asentamientos de iberos y romanos en épocas posteriores. Durante la dominación musulmana, Píñar cuenta entre las principales localidades del territorio consolidándose como sitio fuerte al construirse una fortaleza. Se cree que esta fortaleza sirvió de descanso y recreo a Boabdil y nobles de Granada. Sufrió las embestidas de los jinetes de Cazorla y Jaén, hasta que cayó finalmente durante el mandato del último alcaide Sidi Al – Mandarin, con la conquista efectuada por los Reyes Católicos. Tras la expulsión de los moriscos sufrió un periodo de decadencia. El primer sello del ayuntamiento de Píñar tiene el castillo y data del año 1850.
Ayuntamiento de la localidad.
El Ayuntamiento es también punto de información y ha habilitado un servicio de transporte turístico para acceder a la cueva, ya que el acceso está prohibido al tráfico privado.
El Ayuntamiento alberga en su interior una exposición sobre los yacimientos arqueológicos y las cuevas de su término municipal.
La Iglesia de Santa Mónica es de estilo mudéjar fue levantada en el siglo XVI. Más tarde fue reformada.
El Castillo, situado sobre un promontorio que domina el pueblo, fue construido en época califal entre los siglos IX y X, reformado por los nazaríes a partir del siglo XIII hasta el XV. Fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC), en el año 1931. En la actualidad forma parte del Patrimonio Histórico Artístico del Ayuntamiento.
En el término municipal de Píñar se encuentran vestigios de asentamientos humanos en la época de la prehistoria. De esta forma encontramos diferentes cuevas: Las Ventanas, La Carihuela y Los Confites.